¿Por qué será que no recuerdo cuando era bebe? Se que no soy el único. Estoy seguro que es la parte más desnuda de mi vida y me gustaría acordarme, por ejemplo cuando me sacaron la foto que solía estar en la mesa de luz junto a la cama de mis padres ¿Será que la pureza natural no es suficiente para sobreponerse a lo negro de la vida que le sigue a cualquiera? Tal vez es eso, cuando comenzamos a crecer suelen desvanecerse esas pequeñas cosas para tirarnos de cabeza en un tobogán inmenso e infinito del que nos podemos bajar, pero nunca lo hacemos. A diferencia de los toboganes de las placitas donde antes solía pasarme tarde y noche jugando. Donde los chicos suben, bajan y vuelven a subir.
Hace un tiempo pasé por una plaza y los observé, pareciera que sus piernas no van a parar de saltar y que sus labios solo pueden sonreír. Era divinamente envidiable esa sensación de corazones despiertos y manos abiertas, esas voces que parecen ecos de cada amanecer como el aturdidor sonido del sol naciente raspando las última aguas. Y lo más brillante de todo, sus risas cuadros de vida y sinceridad.
A lo mejor ya no tengo esa risa entre mis capacidades, pero están en mi memoria rara vez amanecen gracias a algún alma poética de no más de metro y medio, y despiertan la nostalgia de plazas y jardines. Olvidada gracias a otra persona que como yo, se ríe solo con su rostro y es aburridamente alto.
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